El municipio israelí de Jerusalén acaba de cancelar todos sus acuerdos anteriores con ciudadanos palestinos del barrio de Al-Bustan, en el barrio ocupado de Silwan en Jerusalén, y rechazó los planes maestros que les había solicitado como una alternativa a la demolición, según el Comité de Defensa de Silwan.
Fakhri Abu Diab, portavoz del Comité, dijo que el municipio israelí ha presentado una objeción a las solicitudes de la comunidad para congelar las órdenes de demolición y está pidiendo al tribunal municipal que autorice la destrucción de las propiedades.
El municipio no acepta el plan maestro elaborado por el profesor Yosef Jabareen (Vía de Planificación Urbana y Regional, Decano Asociado de Investigación en Haifa Technion), ni un acuerdo previo entre el municipio y la comunidad. La comunidad ahora está esperando la decisión del tribunal municipal sobre la demolición.
Abu Diab agregó que esos planes maestros, además de los honorarios legales y de otro tipo, le han costado a la comunidad más de $ 500,000 desde 2011.
Diab señaló que el municipio ha informado al abogado de Al-Bustan, Adv. Ziad Qawar, que ha abandonado su acuerdo de no demoler, y que demolerá casas en el vecindario, para establecer un parque nacional bíblico “El Jardín del Rey”, llamado así porque el Rey David una vez caminó en Bustan. Esta será una extensión de la llamada Ciudad de David y otros asentamientos locales que amenazan y perturban cada vez más a los pobladores de Silwan.
Según el Comité, la inminente demolición de las 100 casas en Al-Bustan de Silwan desplazará a 1.550 personas, la mayoría de las cuales son mujeres y niños.
“Esta demolición masiva, si no se detiene, sentará un precedente peligroso para cambiar las políticas del municipio de demolición individual a masiva y será vista por los palestinos de Jerusalén Oriental como el inicio de la demolición, el desplazamiento y la transferencia de barrios enteros en Jerusalén a fin de vaciar la ciudad de sus residentes palestinos”, dijo Abu Diab. “Es un desafío flagrante para la comunidad internacional, el derecho internacional y la Corte Penal Internacional, así como para la nueva Administración Biden”.
Continuó: “Hay mucho miedo y aprensión entre los residentes. Hacemos un llamamiento a la comunidad diplomática internacional, a las organizaciones de derechos humanos y a los activistas solidarios para evitar que el municipio de Jerusalén Occidental demuele nuestras casas y nos expulse”.
En 2005, el municipio israelí lanzó su plan “Kings Garden” para demoler todo Al-Bustan. La extensa campaña contra la demolición incluyó una audiencia con el comité de la Knesset, reuniones del comité público en el municipio, donde las vistas aéreas de Al-Bustan intentaron probar que el área estaba vacía en 1967, haciendo fotos de las casas de las personas y reemplazándolas con árboles, a pesar de que estaban los residentes que habían nacido en esos hogares muchos años antes.
En 2011, el municipio celebró un acuerdo con los ciudadanos, pidiéndoles que presentaran planes alternativos para el vecindario, lo que hicieron, tal como lo diseñó el profesor Jabareen.
(Con información y foto de la Agencia de Noticias WAFA)
